El tercer grado es cuando los niños deben pasar de “aprender a leer” a “leer para aprender.” Parece fácil, ¿verdad? Como si pasando los días sentados en sus aulas de tercer grado los niños dieran ese paso por arte de magia. En realidad, para la mayoría de los niños del cambio de aprender cómo leer a leer para aprender puede ser muy difícil.

Para ayudar a su hijo a dar este salto como lector es fundamental que usted siga leyéndole y escuchándole cuando lee, o haciendo que lea para sí. Pero hay una otra forma de ayudarle a leer para aprender que tal vez le sorprenda: ¡hable con su hijo! Mantengan conversaciones con todo tipo de palabras (su hijo ya no es un bebe, así que no evite las conversaciones con palabras largas o difíciles: es el momento de ampliar el vocabulario en lugar de desarrollar estrategias de cómo leer las palabras en voz alta.) 

Para asegurarse de que su hijo no se queda atrás cuando llegue el momento de leer para aprender: 1) Léale libros difíciles en voz alta; 2) Use palabras que su hijo no conozca; 3) Hable de grandes temas: qué ocurre en el mundo, historia o cualquier otra cosa que le interese a su hijo, ya sean deportes, cohetes espaciales o animales.