Las universidades comunitarias fueron creadas, y siguen existiendo, con dos propósitos principales. El primero, para ser un puente de la secundaria a la universidad al impartir materias para obtener una licenciatura en humanidades (Bachelor of Arts o B.A.) o una licenciatura en ciencias (Bachelor of Science o B.S.). Cuatro de cada 10 graduados de secundaria comienzan su educación universitaria de esta manera.

La segunda función de las universidades comunitarias es preparar a los estudiantes para el mercado laboral ofreciendo capacitación profesional de nivel inicial, así como cursos para estudiantes adultos que quieren mejorar sus habilidades para reincorporarse al trabajo o para ascensos.

¿Por qué asistir a una universidad comunitaria?

  1. Tu familia tiene un presupuesto limitado.

    Las universidades comunitarias cuestan mucho menos (especialmente para los residentes del estado) que las universidades privadas o estatales. Esto quiere decir que pueden ser una forma económica de que tu hijo complete los dos primeros años de universidad. El dinero que logren ahorrar al vivir en casa e ir a una universidad comunitaria local los puede ayudar a pagar los dos últimos años en una universidad con carreras de cuatro años.

  2. Tu hijo no está seguro de querer ir a la universidad.

    Es posible que tu hijo prefiera comenzar con una carrera de dos años, y decidir después si quiere obtener una licenciatura. Tomar clases para un título asociado en artes (Associate of Arts o A.A.), por ejemplo, puede ayudarle a tener una idea del tipo de educación que puede recibir en una universidad de artes liberales.

  3. Tu hijo no está seguro de qué programa quiere estudiar.

    Muchas personas entran a la universidad sin tener una idea clara de cuál es su enfoque. En una universidad comunitaria, tu hijo puede explorar diferentes áreas de estudio antes de comprometerse con un programa, sin tener que preocuparse mucho por las finanzas. Para ayudar con el proceso de decidir una carrera, las universidades comunitarias ofrecen consejería intensiva que puede ayudar a tu hijo a evaluar sus capacidades, intereses y opciones educativas. Además, en una universidad comunitaria tu hijo puede tener la posibilidad de llevar un espectro más amplio de materias (incluyendo tanto artes liberales como enfocadas en el mercado laboral) en comparación a una institución de cuatro años, lo que hace que sea más fácil probar diferentes opciones en un solo lugar.

  4. Tu hijo no ha estado yendo a clases o su promedio de calificaciones no es muy bueno, y quiere desarrollar sus habilidades antes de transferirse a una universidad de cuatro años.

    Si bien muchas de las universidades de cuatro años tienen criterios de selección para la admisión, como un promedio mínimo requerido de calificaciones, las universidades comunitarias están abiertas a todo público. Si tu hijo quiere asistir a un curso de nivel universitario pero no se siente preparado académicamente, las universidades comunitarias ofrecen clases y tutorías individuales para ayudar a los estudiantes a mejorar sus habilidades básicas. Ten en cuenta que el número promedio de estudiantes en una clase en la mayoría de las universidades comunitarias es mucho más pequeño que en las universidades públicas de cuatro años.

  5. A tu hijo le gustaría estudiar una carrera enfocada en el mercado laboral, como un programa de diseño de modas o un diplomado en computación.

    Esta clase de programas no suelen estar disponibles en las instituciones de cuatro años. Si tu hijo está pensando en buscar empleo luego de graduarse de la universidad comunitaria, existen varios caminos que puede tomar.

    Tu hijo puede obtener un título de asociado, ya sea en humanidades o ciencias (A.A. o A.S.), o un título de asociado en ciencias aplicadas (Associate in Applied Science o A.A.S.). Un A.A.S. suele requerir materias especializadas en ciertos campos, como tecnología de la construcción, reparación de computadoras o electrónicos, así como varias materias de educación general como inglés y matemáticas. Estas carreras se pueden terminar en aproximadamente dos años.

    Si tu hijo quiere estudiar materias en un área especializada de estudio, pero no quiere esperar el tiempo requerido para obtener un título de asociado, muchas universidades comunitarias tienen opciones de diplomados que ofrecen capacitación intensiva en un campo especializado, como diseño asistido por computadora, tecnología de los servicios alimenticios o estudios paralegales. Estos diplomados se pueden terminar en aproximadamente seis meses a un año.

  6. Tu hijo trabaja y necesita un horario flexible.

    En las universidades de cuatro años, los horarios suelen estar enfocados principalmente a estudiantes tradicionales a tiempo completo que van a clases durante el día. En las universidades comunitarias, la población estudiantil tiende a ser más diversa en cuanto a edad, experiencia, antecedentes familiares, nivel socioeconómico y condición de empleo. Los horarios se desarrollan tomando en cuenta las necesidades variables de los estudiantes que asisten a tiempo completo o a medio tiempo, así que las clases suelen ofrecerse a lo largo del día y la noche y a veces incluso los fines de semana. Muchas de estas universidades ofrecen cursos en línea.

Investiguen antes de tomar la decisión

Tu hijo tendrá una experiencia más satisfactoria en una universidad comunitaria si investiga el programa con antelación. Busquen qué programas tienen mejor reputación, cuáles son las tasas de transferencia de estudiantes y qué servicios de apoyo al estudiante tienen disponibles. Existen muchas formas en las que tu hijo puede seguir su educación, pero los programas varían en cada universidad, y depende de él encontrar la mejor opción. Debería agendar una cita con su consejero si no está seguro. El consejero puede ayudarle a decidir si la universidad comunitaria es el lugar correcto para que comience su carrera universitaria.