Selamawit Bekele tenía 11 años cuando se mudó de Etiopía a San José, California con su madre y tres hermanos mayores. Durante los siguientes años, la familia vivió al borde de quedarse sin hogar. Bekele, ahora estudiante de la Universidad de Pensilvania, le da crédito a QuestBridge (enlace en inglés) (una organización sin fines de lucro que ha ayudado a casi 5.000 estudiantes de secundaria de alto rendimiento y bajos ingresos a obtener la admisión y becas de cuatro años en las mejores universidades) por ayudarla a ir a la universidad.

“Como inmigrante, no tenía conocimiento del proceso de solicitud de ingreso a la universidad y no tenía un sistema de apoyo que nos guiara a mi familia y a mí a través de él. Si no fuera por el apoyo que recibí de QuestBridge, no me hubiera atrevido a pasar por el proceso de solicitud de ingreso a la universidad. Definitivamente no hubiera sabido que las universidades privadas podían ser accesibles para una persona con mis antecedentes financieros”.

Fundada en 1994, la misión de QuestBridge es servir a los chicos de familias de bajos ingresos que han demostrado que tienen la determinación (y las habilidades académicas) para tener éxito en la universidad asegurándose de que lleguen allí.
“Buscamos estudiantes que demuestren un alto rendimiento académico a pesar de enfrentar dificultades financieras”, dice Grace Sun, directora de relaciones con egresados de QuestBridge. “La mayoría de nuestros solicitantes exitosos toman los cursos más rigurosos disponibles, se ubican entre el 5 y el 10 por ciento de los mejores de su clase y demuestran curiosidad intelectual. Los solicitantes generalmente provienen de familias que ganan menos de $65.000 al año para una familia de cuatro”.

Para estudiantes del tercer año de secundaria: una ventaja en la preparación universitaria

QuestBridge comienza a trabajar con adolescentes en el 11º grado a través del programa College Prep Scholars (enlace en inglés), que ayuda a los estudiantes prometedores de familias de bajos ingresos con la búsqueda y preparación para la universidad. Los adolescentes se postulan en la primavera de su tercer año de secundaria, y todos los que son aceptados en el programa son invitados a una conferencia de admisión universitaria y pueden contar con la distinción de lucir bien en sus solicitudes de ingreso universitarias (especialmente para los 39 socios universitarios de QuestBridge (enlace en inglés), que incluyen, entre otros, a Yale, Stanford, Northwestern y Duke). Algunos adolescentes también ganan otros premios, como becas para asistir a programas universitarios de verano, computadoras portátiles, ayuda para redactar ensayos universitarios, tutorías y más. En el 2017, QuestBridge seleccionó a 3.736 estudiantes de tercer año para su programa de becarios, más que los 3.404 estudiantes del 2016.

Para estudiantes del último año de secundaria: solicitudes, admisiones e incluso becas

Independientemente de que los estudiantes presenten su solicitud para el programa College Prep Scholars el verano anterior al último año de secundaria, los estudiantes que ingresan al 12º grado pueden comenzar sus solicitudes al programa National College Match de QuestBridge (enlace en inglés). La competencia es dura, pero las recompensas son excelentes. Los estudiantes completan sus solicitudes en septiembre, aplican a 12 universidades principales asociadas y descubren si son finalistas en octubre. El 1 de diciembre descubren si ganaron una beca (lee más sobre cómo funciona, enlace en inglés). En el 2017, de más de 15.000 solicitantes, hubo 5.759 finalistas y 918 ganadores de la Beca College Match. Para los ganadores, el premio es la admisión anticipada a una de las 39 universidades asociadas (enlace en inglés) con una beca completa de cuatro años que cubre la matrícula, el alojamiento, comida y otros gastos. Para los finalistas, aunque las recompensas no están garantizadas, pueden ser igualmente grandiosas. Las universidades asociadas pueden considerar las solicitudes de los finalistas como parte del grupo regular de solicitantes pendientes por decisión, y muchos finalistas no solo son admitidos, sino que también obtienen becas. En el 2016, por ejemplo, además de los 767 ganadores, 1.750 de los más de 5.000 finalistas fueron admitidos por decisión ordinaria.

Apoyo continuo

En el 2017, el 76 por ciento de los ganadores de las becas College Match fueron los primeros en su familia en asistir a la universidad. Muchos de los estudiantes que son los primeros de su familia en ingresar a la universidad se sienten aislados cuando llegan al campus. Pueden sentir que no pertenecen, dice Sun, o pueden sentir que han abandonado a su familia al buscar una educación superior. Para ayudar a los estudiantes a conocerse y tener una comunidad, hay grupos QuestBridge en cada campus asociado. La división de Pomona College, por ejemplo, tiene casi 100 miembros.

Cuando Bekele llegó por primera vez a Penn, no sentía que pertenecía ahí, pero el grupo QuestBridge del campus la ayudó a sentirse apoyada, como si fuera parte de una comunidad. “Te hacen sentir cómoda”, dice Bekele.