Las decisiones que tu hijo tome, tan temprano como en el noveno grado, pueden tener un gran impacto en su preparación universitaria. Estas decisiones podrían influir en cuándo ingresará a la universidad, qué tipo de institución elegirá y hasta si decidirá asistir a la universidad.

Como resultado, los estudiantes pueden sentir una gran presión para realizar el trabajo necesario para ingresar a la universidad de su elección. Como padre, tu apoyo será crucial durante este período para ayudar a tu hijo a tomar decisiones que lo conduzcan hacia la universidad y el camino profesional que más le convenga. A continuación, te presentamos algunas cosas que tu hijo deberá hacer para prepararse para la planificación universitaria, así como algunas formas en las que tú puedes ayudar.

10 formas de impulsar la preparación para la universidad

  1. Involucrarse

    Prepararse para la universidad no se trata solo del trabajo académico. Tu hijo debe encontrar algo que realmente le guste hacer y dedicarle tiempo. Desarrollará habilidades y tendrá más probabilidades de que las universidades lo admitan. A las universidades les gusta tener estudiantes diversos y motivados. Participar en actividades muestra que tu hijo está comprometido y ha asumido responsabilidades.

  2. Dedicación

    Si tu hijo quiere ir a la universidad más adelante, debería estudiar y trabajar duro ahora y a lo largo de sus cuatro años de escuela secundaria.

  3. Tomar cursos desafiantes

    Las universidades revisan las calificaciones de tu hijo, pero también la dificultad de sus cursos. Quieren ver que se ha desafiado a sí mismo. Además, si tu hijo toma cursos avanzados como el Programa de Bachillerato Internacional (IB) o clases de colocación avanzada (AP), es posible que pueda obtener créditos universitarios.

  4. Solicitar ayuda

    ¿Está teniendo problemas tu hijo en alguna materia? Muchas escuelas tienen estudiantes de grados superiores (que toman el rol de tutores) que ayudarán a tu hijo de manera gratuita. Tu hijo debería hablar con sus maestros o consejeros y hacerles saber que le gustaría tener ayuda extra.

  5. Leer

    Tu hijo debería leer al menos 30 minutos todos los días, aparte de estudiar y hacer tareas. Lo mejor es que lea lo que le interese: revistas, novelas, etc. La habilidad de tu hijo para la lectura será esencial cuando tome los exámenes PSAT/NMSQT y SAT.

  6. Prepararse

    Los estudiantes toman el examen PSAT/NMSQT en el tercer año (o incluso en el segundo año de la escuela secundaria). Por lo tanto, tu hijo debería tener un horario lo más desafiante posible durante la escuela secundaria. Debería hablar con su consejero para asegurarse de tomar cursos sólidos de matemáticas y otras materias que lo prepararán.

  7. Obtener la información para ingresar a la universidad

    ¿Cómo sabrá tu hijo todos los procedimientos correctos para ingresar a la universidad? Debería preguntarle a alguien que ya lo ha hecho. Tu hijo debería conocer a sus consejeros. También podría preguntarle a un asesor de carreras en una universidad local o a un maestro en quien confíe. La investigación en línea también puede ser útil.

  8. Apoyo familiar

    Si tú mismo no has asistido a la universidad, es posible que pienses que no puedes ayudar a tu hijo. Eso no es cierto. Puedes hablar con sus consejeros y ayudarlo a mantenerse en el camino correcto. Tu apoyo será importante mientras comienza a tomar decisiones importantes sobre su futuro.

  9. Buscar mentores

    Aunque apoyes las ambiciones de tu hijo, el estímulo de otros adultos que puedan aportar su entusiasmo ayudarán a tu hijo a asegurar su éxito. Podría buscar a un consejero, un maestro o alguien en quien confíe para ayudarlo a desarrollar sus intereses en un área específica.

  10. Superar obstáculos personales

    La escuela secundaria puede ser estresante para los estudiantes. Si tu hijo tiene un problema que realmente esté afectando su trabajo escolar, intenten resolverlo juntos. Mantén la mente abierta y escúchalo. El consejero de tu hijo también podría ayudar con consejos o simplemente poniéndolo en contacto con recursos en la escuela o en la comunidad que podrían ayudarlo.