La fluidez describe el ritmo y la soltura del estilo de lectura de un niño. La fluidez en la lectura ha sido considerada como el puente entre la decodificación y la comprensión, ya que las habilidades de decodificación son necesarias para dominar la fluidez en la lectura y, a su vez, la fluidez resulta esencial para la comprensión de la lectura. Un niño que no domine la decodificación leerá titubeando, y la poca fluidez entorpecerá la comprensión de la lectura. Un niño con una fluidez consolidada es capaz de leer con soltura y naturalidad, con una voz similar a la que usa al hablar, con una velocidad y expresión adecuadas.

Un lector de kínder y primer grado con buena fluidez es capaz de:

  • Nombrar y reconocer con facilidad todas las letras del alfabeto.
  • Reconocer las palabras visuales más comunes con facilidad y rapidez.
  • Leer textos sencillos con facilidad y comprensión.
  • Con práctica, leer con tono natural y conversacional, manejando frases y entonaciones.
  • Autocorregir errores de lectura mediante pistas en el texto e ilustraciones.
  • Al culminar el primer grado, leer textos adecuados para su nivel académico con intención y comprensión.

Otras habilidades de lectura necesarias en kínder y 1.° grado:

  • Decodificación
  • Comprensión
  • Conocimiento

La siguiente etapa: conceptos básicos de la lectura en 2.° y 3.° grado:

  • Fluidez
  • Decodificación
  • Comprensión
  • Conocimiento