Tu hijo acaba de terminar un emocionante año en tercer grado y está haciendo grandes avances en lectura y matemáticas. A continuación, te presentamos algunas maneras en que tú y tu familia pueden ayudar a tu hijo a seguir aprendiendo durante el verano y comenzar el nuevo año escolar con buen pie.

Actividades de aprendizaje para el verano antes del 4.° grado

  1. Pide las tareas de verano de matemáticas

    ¡¿Qué?! Tu hijo te verá como si estuvieras loco. Pero pedirle al maestro de este año que te ayude a mantener actualizadas las habilidades matemáticas de tu hijo es una idea inteligente. El maestro probablemente te dará ideas sobre en qué debería centrarse tu hijo. Si vas a tener el tiempo y la disciplina, pregúntale si puedes llevarte a casa el libro de texto de matemáticas de cuarto grado (o el libro de texto de matemáticas de tercer grado, si tu hijo necesita más tiempo en esas habilidades), y pasa tiempo durante el verano trabajando en las lecciones. También puedes imprimir hojas de trabajo de matemáticas de tercer grado (en inglés) para repasar, u hojas de trabajo de matemáticas de cuarto grado (en inglés) para adelantarte.

  2. Ayuda a tu hijo a convertirse en un coleccionista de palabras

    Tu hijo estuvo expuesto a libros, poesía y artículos nuevos y desafiantes este año, y aprendió muchas palabras nuevas. Cuantas más palabras pueda aprender, tanto en inglés como en español, más sólidas serán sus habilidades lingüísticas. ¿La mejor manera de aumentar su vocabulario? Léele tanto como sea posible. Léele a tu hijo en voz alta tan a menudo como puedas y elige libros o artículos desafiantes que tengan palabras nuevas para aprender. Haz que tu hijo lea todos los días este verano, tanto en voz alta como en silencio. Visiten la biblioteca semanalmente para obtener libros nuevos, para inspirar a tu hijo a seguir aumentando su creciente colección de palabras nuevas.

  3. Saber teclear es importante

    Solíamos llamarlo mecanografía y aprendíamos a mecanografiar cuando éramos adolescentes. Ahora se llama teclear, y los estudiantes comienzan a aprenderlo desde el cuarto grado. Especialmente si tu hijo ya usa una computadora con regularidad, es una buena idea que practique buenos hábitos (como no escribir con un dedo a la vez). Typing.com es un programa en línea con juegos divertidos, pruebas y lecciones para ayudar a tu hijo a familiarizarse con el teclado. Deberás registrar a tu hijo para obtener una cuenta gratuita (el sitio solicita que los usuarios tengan 13 años). Las sesiones cortas de práctica de 10 a 15 minutos varias veces a la semana, harán que se sienta más cómodo con el teclado cuando comience la escuela.

  4. Tu curioso investigador

    El verano es un buen momento para que los niños curiosos aprendan más sobre un tema que quizás no hayan tenido tiempo de seguir durante el año escolar. Deja que tu hijo elija un tema y luego investigue todo lo que pueda sobre búhos, tiburones, Marte, diseño de vestuario, cómo se hace la bebida de cola o la codificación. El bibliotecario de la biblioteca local puede ayudarte a encontrar libros. Newsela.com es una buena fuente en línea para artículos al nivel de grado sobre ciencia, historia y eventos actuales en español e en inglés.

  5. Siguiendo instrucciones

    ¿Estás armando un mueble? Deja que tu hijo te ayude a seguir el diagrama. ¿Tu familia recibió un nuevo dispositivo o juego de mesa? Haz que tu hijo lea las instrucciones, se convierta en el experto y le enseñe al resto de la familia.

  6. Noche de juego

    Los juegos de baraja son una forma divertida de practicar las habilidades matemáticas. Para jugar la Guerra de Multiplicaciones, comienza por quitar de la baraja las cartas que tengan una cara. El as representa 1. Reparte las cartas entre tú y tu hijo de manera equitativa. Luego, ambos jugadores colocan una carta boca arriba. En el juego normal, el jugador con la carta con el número más alto gana la ronda y mantiene las dos cartas; al final del juego, el jugador que tiene más cartas gana. Pero en la Guerra de Multiplicaciones, quien dice el resultado de los dos números multiplicados gana la ronda y obtiene las dos cartas. Por ejemplo, si eliges un tres y tu hijo elige un seis, el jugador que diga “18” primero gana la ronda. Comienza lentamente y dale a tu hijo el tiempo para encontrar la respuesta antes de que la digas. A medida que él comience a aprender datos matemáticos más altos, puedes volver a agregar las cartas que tienen una cara. Primero con todas las cartas que tienen una cara y que representan 10, y luego con el Jack (jota) que representa 11, la reina que representa 12 y el rey que representa 13.

  7. ¡A sudar!

    El ejercicio vigoroso es muy importante para el desarrollo del cerebro. Puede ser tan simple o estructurado como tu hijo quiera. Jugar fútbol en un equipo es genial. También lo es su propio triatlón de frisbi, jugar al hula hoop y al freeze-dancing. Lo importante es que tu hijo sude durante al menos 30 minutos todos los días.

  8. Siguiendo la receta de cocina

    El verano es un buen momento para enseñarle a tu hijo una receta familiar o tratar de hornear algo nuevo. ¿Cuántas personas lo van a comer? Tal vez quieras hacer el doble de lo indicado en la receta, o solamente la mitad. Deja que tu hijo lea, mida y mezcle tanto como pueda. Si le gusta cocinar u hornear, sugiérele que lleve un diario de recetas donde escriba sus recetas favoritas, incluidas las notas sobre si hizo el doble de lo indicado en la receta o si agregó nuevos ingredientes.

¿Quieres más ideas de aprendizaje de verano? Ve nuestras recomendaciones para el aprendizaje de verano para niños de cualquier edad y específicamente para los veranos antes del 1.° grado, 2.° grado, 3.° grado y 5.° grado.

Translated by: SpanishWithStyle.com